El sistema nervioso es el centro de mando del cuerpo, y dependemos de él para sobrevivir. Nos guía en casi todo lo que pensamos, sentimos y hacemos, ya que permite que el cuerpo procese y responda a la información. Por eso, es importante cuidarlo.
Aquí te presentamos 10 formas respaldadas por la ciencia para cuidar de tu sistema nervioso.
¿Qué es el sistema nervioso?
El sistema nervioso es el sistema de comunicación interna del cuerpo. Está formado por dos partes: el sistema nervioso central (SNC) y el sistema nervioso periférico (SNP).
El SNC incluye el cerebro y la médula espinal, mientras que el SNP está compuesto por todos los nervios restantes en el cuerpo. Además, el SNP se subdivide en el sistema somático y el sistema nervioso autónomo.
El sistema somático controla las respuestas del cuerpo que una persona puede comandar voluntariamente (como mover un músculo), mientras que el sistema autónomo regula acciones involuntarias necesarias para mantenernos saludables (como bombear sangre).
Dentro del sistema nervioso, las células nerviosas reciben información a través de los sentidos del cuerpo: olfato, vista, sonido, tacto y gusto. Esta información se transporta y se interpreta en el cerebro para que pueda responder con las funciones necesarias del cuerpo.
10 formas respaldadas por la ciencia para cuidar tu sistema nervioso
Entonces, ¿qué puedes hacer para cuidar tu sistema nervioso?
La investigación ha demostrado que varios factores pueden aumentar el riesgo de daño a los nervios. Aunque algunos, como la edad, no se pueden controlar, otros, como los hábitos de estilo de vida, sí pueden ajustarse. Aquí algunas maneras de cuidar tu sistema nervioso…
1. Camina descalzo de vez en cuando
Nuestros pies tienen más de 200,000 terminaciones nerviosas,más que cualquier otra área del cuerpo. Estas terminaciones envían mensajes al cerebro para ayudar a mantener el equilibrio mientras caminamos.
Caminar descalzo es una excelente manera de estimular el sistema de comunicación del cuerpo. Un estudio encontró que el contacto físico con la superficie terrestre puede ayudar a regular el sistema nervioso y el ritmo circadiano; mejorando la regulación de la temperatura corporal, la digestión y la presión arterial.
2. Limita el consumo de alcohol
El alcohol interfiere con las vías de comunicación del cerebro, lo que puede dificultar el control del equilibrio, el habla y otras habilidades motoras. El consumo prolongado de alcohol puede alterar la estructura neuronal y aumentar el riesgo de demencia.
3. Basar tu dieta en alimentos integrales
Nuestra dieta desempeña un papel clave en permitir que el sistema nervioso funcione de manera óptima. Se recomienda una alimentación rica en nutrientes y baja en alimentos procesados. Las dietas poco saludables están relacionadas con la inflamación crónica, que puede aumentar el riesgo de daño a los nervios.
4. Asegúrate de consumir suficientes grasas saludables
Las grasas saludables son esenciales para la salud del sistema nervioso. Las células nerviosas están rodeadas por una capa protectora llamada vaina de mielina, y hay evidencia de que consumir suficientes grasas saludables puede mantener la salud de esta capa.
Alimentos como el aguacate, el pescado graso y los frutos secos son buenas fuentes de grasas saludables.
5. Haz ejercicio regularmente
El ejercicio no solo mejora el flujo de oxígeno al cerebro, sino que también libera hormonas como la serotonina, importantes para la salud cerebral. Además, se ha encontrado que el ejercicio mejora la neuroplasticidad y ayuda a regenerar estructuras en el cerebro afectadas por el envejecimiento.
6. Consume vitaminas y minerales amigables para los nervios
Las vitaminas B1, B6 y B12 son esenciales para el sistema nervioso, ya que ayudan a proteger y reparar los nervios. Además, minerales como el magnesio y el potasio son vitales para la comunicación entre las células cerebrales.
7. Controla tus niveles de azúcar en sangre
Niveles altos de azúcar en sangre a largo plazo pueden dañar los vasos sanguíneos pequeños, lo que evita que el oxígeno y los nutrientes lleguen a los nervios. Esto puede causar neuropatía diabética, que afecta principalmente las manos y los pies.
8. Controla tu colesterol y presión arterial
El colesterol alto y la presión arterial elevada también pueden dañar el sistema nervioso, especialmente si se acumulan depósitos de colesterol en los tendones, lo que puede presionar los nervios. Mantener el colesterol y la presión arterial bajo control es clave para prevenir estos problemas.
9. Controla el estrés
El sistema nervioso regula nuestra respuesta física al estrés. Si bien cierto nivel de estrés puede ser beneficioso, el estrés crónico puede interferir con la comunicación neuronal, afectando la memoria y los reflejos. Mantener niveles de estrés bajo control es importante para la salud nerviosa.
10. Deja de fumar
Fumar estrecha los vasos sanguíneos, lo que reduce el flujo sanguíneo a los nervios y aumenta el riesgo de daño nervioso. Dejar de fumar puede ser una de las mejores decisiones para la salud de tu sistema nervioso.
Reflexión final…
Afortunadamente, hay muchas formas respaldadas por la ciencia para el sistema nervioso, desde hacer ejercicio hasta adoptar una dieta rica en nutrientes.