Aunque el cáncer de colon puede desarrollarse sin síntomas evidentes, presta atención a las siguientes señales:
Cambio persistente en los hábitos intestinales Si notas un cambio prolongado (más de tres semanas) en tus hábitos intestinales, como diarrea, estreñimiento, heces más delgadas de lo habitual o alternancia entre ambos, consulta a tu médico.
Sangre en las heces La sangre, ya sea roja brillante, oscura o negra, puede ser un signo de cáncer de colon. Aunque también puede deberse a otras causas, como hemorroides, es importante investigarlo.
Dolor constante en el abdomen o el recto Un dolor vago o persistente en el abdomen, que puede empeorar al comer, también es una señal de alerta. Además, molestias como hinchazón, gases o sensación de plenitud pueden acompañar al dolor.
Sensación de evacuación incompleta Un tumor en el colon puede generar la sensación de que los intestinos no se vacían por completo, lo que resulta incómodo y provoca urgencias frecuentes para ir al baño.
Debilidad o cansancio extremo sin causa aparente Si hay sangrado en el tracto digestivo, puede provocar anemia por falta de hierro, causando debilidad y fatiga excesiva.
Pérdida de peso inexplicada Aunque menos frecuente, una pérdida de peso repentina sin motivo puede ser indicativa de cáncer de colon, especialmente si se acompaña de otros síntomas.
Recuerda: tener uno o más de estos síntomas no significa necesariamente que tengas cáncer. Sin embargo, es crucial buscar atención médica para obtener un diagnóstico adecuado.
Factores de riesgo del cáncer de colon
Existen varios factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de colon:
Edad Más del 90% de los casos se detectan en personas mayores de 50 años.
Historial familiar Tener familiares cercanos que hayan padecido cáncer de colon aumenta el riesgo, especialmente si fueron diagnosticados antes de los 45 años.
Genética Condiciones hereditarias como la poliposis adenomatosa familiar (FAP) o el síndrome de Lynch incrementan considerablemente el riesgo de desarrollar la enfermedad.
Dieta y estilo de vida Una dieta alta en carnes procesadas y baja en fibra está relacionada con el cáncer de colon. Además, el sobrepeso, el sedentarismo, el tabaquismo y el consumo de alcohol también son factores de riesgo.
Trastornos digestivos Enfermedades inflamatorias como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, si se padecen durante más de 10 años, aumentan la probabilidad de desarrollar cáncer de colon.
Reflexión final
Hablar sobre el cáncer puede resultar difícil, pero es esencial priorizar nuestra salud. Adoptar hábitos saludables, como una dieta equilibrada y actividad física, y no ignorar los síntomas son pasos cruciales. Además, las pruebas de detección son una herramienta invaluable para prevenir o diagnosticar el cáncer en etapas tempranas.
Si experimentas síntomas o tienes preocupaciones, consulta con tu médico. La detección temprana puede marcar la diferencia.