El pasado año se registraron 586.913 transacciones de compraventa de viviendas en España, lo que lo convierte en uno de los tres años con mayor volumen de ventas en la historia reciente.
La vivienda representa uno de los mayores retos para los españoles. Aquellos que tienen la posibilidad de adquirir una casa se enfrentan a la disyuntiva entre comprar o alquilar. Dependiendo de las condiciones del mercado inmobiliario, la decisión puede inclinarse hacia una u otra opción. No obstante, lo que resulta evidente es que adquirir una vivienda mediante hipoteca se ha transformado en un lujo. De hecho, la edad media para comprar la primera vivienda en España es de 41 años. La mayoría de los compradores se encuentra en el rango de 35 a 44 años (32%), seguidos por aquellos entre 24 y 34 años (30%).
El impacto del precio del metro cuadrado
Uno de los factores determinantes en esta realidad es el incremento en el precio por metro cuadrado, que ha crecido un 8,5% respecto al año pasado. Actualmente, el coste medio por metro cuadrado se sitúa en 2.327 euros. Esto significa que un piso de aproximadamente 80 metros cuadrados ha pasado de costar 171.600 euros a 186.160 euros. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el perfil promedio de los propietarios corresponde a personas con un nivel socioeconómico alto o medio-alto que viven en pareja.
El 50% de las personas que buscan adquirir vivienda pertenecen al segmento de nivel socioeconómico alto, mientras que un 23% tiene un nivel medio y el 26% restante se encuentra en los niveles medio-bajo o bajo. En cuanto a la procedencia geográfica, los mayores porcentajes de demandantes de vivienda se concentran en Andalucía (16%), seguidos por Madrid y Cataluña (14% cada una) y la Comunidad Valenciana (10%).
Acceso a la vivienda: los retos de los jóvenes
En los últimos 15 años, el porcentaje de propietarios jóvenes se ha reducido drásticamente. En 2007, el 58,1% de las personas de entre 16 y 29 años eran titulares de una vivienda, mientras que actualmente este porcentaje ha caído al 29%. Esta situación responde a factores como la inestabilidad laboral y la falta de ahorro, que dificultan el acceso al mercado inmobiliario.
Para abordar esta problemática, tanto el Gobierno como diversas comunidades autónomas han implementado iniciativas de apoyo. Entre estas, se ofrecen avales que cubren entre el 15% y el 20% del valor de la vivienda para facilitar la adquisición. Además, el Ejecutivo pone a disposición avales que permiten financiar hasta el 100% del coste del inmueble. Sin embargo, los compradores deben asumir los gastos e impuestos asociados a la compraventa, que suelen representar entre el 10% y el 12% del precio de venta.
Estas medidas buscan reducir el tiempo necesario para ahorrar y promover la adquisición de viviendas a edades más tempranas, tratando de revertir la situación actual de vulnerabilidad de los jóvenes.