¿Te encanta el estilo bohemio de los años 70? ¿Siempre has querido crear cosas como joyas, bolsos y ropa a mano? Si es así, es posible que te interese el macramé.
Es una forma de arte en fibra que implica atar nudos en "cordón de macramé" para crear una amplia variedad de artículos decorativos y funcionales.
Tiene raíces antiguas que se remontan a tejedores árabes del siglo XIII que lo utilizaban para elaborar flecos decorativos en toallas, chalecos y alfombras. Algunas personas incluso argumentan que los orígenes del macramé son aún más antiguos, llegando hasta la China del siglo III.
No fue hasta los siglos XIV, XV y XVI que el macramé se extendió por Europa, y en el siglo XVII se hizo tan popular que incluso la reina María II lo enseñó a sus damas de compañía.
Desde entonces, ha tenido altibajos en su popularidad. Fue especialmente popular en la era victoriana, utilizado por amas de casa para crear manteles y sábanas, y nuevamente en los años 70, donde se convirtió en una parte icónica de la cultura hippie. En los últimos años, hemos visto otro aumento en su popularidad.
Si nunca has probado el macramé antes, pero te apetece intentarlo, aquí tienes todo lo que necesitas saber para empezar.
1. Aprende los nudos básicos de macramé
Aunque puedes embellecer tus diseños de macramé con cosas como cuentas de vidrio y flecos decorativos, el arte en sí consiste esencialmente en atar nudos. Y una de las mejores cosas es que sólo necesitas conocer un puñado de nudos para crear desde el diseño más simple hasta grandes y elaboradas obras maestras.
Así que, antes de invertir en materiales bonitos (que cubriremos más adelante), merece la pena conseguir un cordón de macramé de algodón de 3 a 5 mm de grosor y practicar algunos nudos. Este tipo de cordón es ideal para principiantes ya que es fácil de anudar, pero también de deshacer si cometes un error.
Al atar macramé, necesitarás anclar tu proyecto para que puedas tener resistencia y evitar que los cordones se muevan y se enreden mientras trabajas. La forma en que ancles tu macramé dependerá completamente de tu proyecto y de cómo te gustaría trabajar.
Por ejemplo, si estás haciendo un colgante de pared, puedes colgar un listón de madera de la pared en el lugar donde te gustaría que cuelgue una vez terminado y trabajar allí. Muchos entusiastas también cuelgan proyectos de perchas de ropa con ganchos en S. O, para proyectos más pequeños, podrías utilizar una tabla de macramé. Si deseas hacer tu propia tabla en casa, ¡anímate a buscar tutoriales en la web!
Recuerda que no hay una forma correcta o incorrecta de anclar tu proyecto, ¡así que sé creativo! Si sólo quieres aprender algunos nudos, puedes incluso pegar tus cordones a una pared o a un mueble resistente.
Una vez que hayas decidido cómo vas a anclar tus cordones, es hora de aprender algunos nudos básicos:
Nudo cabeza de loro: Uno de los primeros nudos que atarás en cualquier proyecto de macramé. Este es el nudo que fijará tu cordón a un objeto, como un listón, un anillo o incluso otro cordón. No podrás practicar este nudo si usas el método de cinta adhesiva mencionado anteriormente.
Nudo de envoltura: Se utiliza para agrupar varios cordones, ya sea al principio, al final de tus proyectos, o al hacer borlas.
Nudo cuadrado: Una vez que hayas unido dos cordones a tu listón, anillo o base que estés utilizando, puedes practicar el nudo cuadrado, uno de los nudos más comunes en el macramé.
Nudo cuadrado alterno: Para atar nudos cuadrados alternados, no necesitas aprender un nudo completamente nuevo; simplemente alternas los cordones que estás utilizando.
Nudo medio: Este nudo se usa para crear patrones horizontales y diagonales.
Nudo espiral: Es esencialmente la mitad de un nudo cuadrado. Cuando se atan en sucesión, forma un hermoso patrón en espiral.
Aprender estos seis nudos básicos te proporcionará una gran base para comenzar con algunos proyectos de macramé. Sin embargo, desde nudos de bayas hasta nudos de barril, hay muchos otros que puedes aprender. Así que, si tu proyecto lo exige, puedes buscar el nudo que necesites en YouTube, y encontrarás numerosos tutoriales para ayudarte.
2. Explora otros recursos de aprendizaje que puedes utilizar para comenzar con el macramé
Como ya hemos mencionado, una de las mejores cosas de este pasatiempo es lo accesible que es aprenderlo. Así que, una vez que hayas aprendido los nudos básicos, puedes empezar a elegir qué quieres hacer. Sin embargo, si quieres aprender más sobre el arte, antes de empezar, o si estás interesado en aprender mientras avanzas, hay muchos recursos disponibles.
Existen cursos en vídeo que te guiarán a través del mundo del macramé. Aunque no son gratuitos, ya seas un principiante o un veterano del macramé, te proporcionarán todo lo que necesitas saber para crear proyectos bellos y diseñar tus propias piezas.
También puedes buscar cursos de macramé en tu área si estás interesado en aprender el oficio en persona. Si no encuentras ninguna clase que te interese, siempre vale la pena preguntar en tu tienda local de manualidades, ya que a veces organizan clases o pueden recomendarte alguna.
Si prefieres aprender leyendo, hay muchos libros excelentes sobre esta práctica.
Y, por último, una de las mejores y más completas fuentes para aprender macramé es, sin duda, Internet. Puedes buscar tutoriales específicos de proyectos en diversos sitios, lo que significa que sólo tendrás que seguir las instrucciones.

3. Elige tu proyecto de macramé
El siguiente paso en tu viaje por el macramé es elegir tu proyecto. Y aunque la lista de cosas que puedes hacer con macramé es interminable, vamos a repasar algunos de los proyectos más populares para principiantes.
Colgadores de plantas: Una forma interesante y moderna de mostrar tu vegetación tanto en interiores como exteriores.
Pulseras de amistad: Un clásico en el mundo del macramé, ideales como accesorios o para regalar.
Posavasos: Otro proyecto divertido y no muy grande para que los principiantes comiencen a perfeccionar sus habilidades de anudado.
Bolsas de tela: Conscientes del impacto ambiental de las bolsas de plástico, hacer tu propia bolsa de macramé es una excelente alternativa.
Decoraciones navideñas: Puedes utilizar el macramé para crear hermosas decoraciones para el árbol o regalos para las fiestas.
Colgantes de pared: Uno de los proyectos más populares en la comunidad del macramé, que ha vuelto a estar de moda.
Estos son solo algunos de los proyectos que puedes realizar, y no es una lista exhaustiva. Para más inspiración, busca ideas en plataformas de manualidades.
4. Reúne tus materiales de macramé
Una vez que hayas aprendido los nudos básicos y elegido tu proyecto, puedes empezar a pensar en los suministros y materiales, siendo el principal tu cordón de macramé.
Cordón
Al principio, puede ser complicado entender los diferentes nombres para el cordón de macramé. Algunos lo llaman cuerda o hilo. Además, hay muchos tipos, colores y grosores diferentes para elegir, por lo que seleccionar el adecuado puede ser algo complicado.
Existen tres tipos principales de cordón de macramé:
Cordón de hebra simple: Este es el más popular entre los entusiastas del macramé, suave y maleable.
Cordón trenzado: Hecho de varias hebras entrelazadas. Es más robusto y da una textura más gruesa a tus creaciones.
Cordón de tres hebras: Formado por tres hebras individuales retorcidas entre sí, es más resistente que el de hebra simple.
Al elegir el tipo de cordón, es totalmente cuestión de preferencia personal. Piensa en cómo quieres que luzca tu pieza y si será decorativa o funcional.
Otras consideraciones al elegir tu cordón
También es importante considerar de qué material está hecho el cordón y su tamaño. Generalmente, se clasifican en dos categorías: sintéticos y naturales. Los primeros suelen ser menos suaves, mientras que los naturales, como el algodón y la lana, son más populares entre los aficionados al macramé.
Por último, cuando elijas el grosor de tu cordón, la regla general es que cuanto más grande sea tu proyecto, más grueso debe ser. La mayoría utiliza cordones de tamaño medio, y se recomienda un grosor de entre 4 mm y 5 mm para principiantes.

Otros materiales que necesitarás
Mientras que a su nivel más básico, el macramé consiste sólo en anudar cuerdas, para crear tus hermosas piezas, podrías querer invertir en algunas herramientas y otros materiales.
Por ejemplo:
Tijeras afiladas: Asegúrate de que sean específicas para cortar fibras y textiles.
Cinta métrica: Para medir tus cordones.
Tabla de macramé (opcional): Puedes comprar tablas de macramé ya hechas si no deseas hacer la tuya.
Clavos (opcional): Útiles si necesitas anclar tu cordón a una tabla de macramé.
Un listón de madera o un anillo (opcional): Muchos proyectos utilizan un listón de madera o un anillo como punto de partida.
Cuentas (opcional): Puedes usar cuentas de madera, plástico o vidrio para embellecer tus proyectos.
Reflexiones finales…
¡Y eso es todo! Una vez que hayas aprendido lo básico, elegido tu proyecto y reunido todos tus materiales y herramientas, estás listo para empezar a crear. Esperamos que hayas disfrutado de esta guía introductoria al macramé y que te haya resultado útil.