En nuestras relaciones, cada uno de nosotros interactúa de manera distinta, lo que se traduce en necesidades diferentes dentro de una relación.
Identificar nuestro estilo de apego puede marcar una gran diferencia para entender quiénes somos y ayudarnos en el camino hacia encontrar la pareja adecuada y construir relaciones sanas.
¿Qué son los estilos de apego?
Los estilos de apego se refieren a la manera en que nos conectamos y establecemos vínculos con otras personas. Generalmente, estos estilos se desarrollan como resultado de las interacciones que experimentamos desde la infancia con nuestros padres o cuidadores principales.
Este concepto se conoce como teoría del apego, la cual sostiene que las relaciones que tenemos en nuestros primeros años impactan significativamente en la forma en que nos relacionamos con los demás a lo largo de la vida, incluidas las relaciones románticas.
Si crecemos en un ambiente donde sentimos que hay personas cálidas y amorosas que nos apoyan, aprendemos a esperar lo mismo de los demás, y nos sentimos merecedores de amor, lo que da lugar a un apego seguro. Sin embargo, si nuestras experiencias nos enseñan que no siempre podemos contar con otros para recibir apoyo, es probable que desarrollemos un estilo de apego inseguro.
Estilos de apego principales
El estilo de apego ansioso: Las personas con este estilo suelen anhelar la intimidad y pueden obsesionarse con sus relaciones. A menudo, buscan maneras de acercarse a su pareja, pero estos intentos pueden resultar contraproducentes.
El estilo de apego evitativo: Las personas con un estilo evitativo suelen valorar su independencia y tratan de evitar el apego emocional intenso con los demás.
El estilo de apego evitativo-temeroso: Es una combinación de los estilos ansioso y evitativo. Estas personas suelen temer el abandono, lo que les lleva a evitar relaciones e intimidad.
El estilo de apego seguro: Las personas con un estilo seguro se sienten cómodas con la intimidad y el compromiso, y no se preocupan demasiado por sus relaciones.
¿Qué hace que una relación sea segura?
Las relaciones más exitosas suelen ser aquellas donde al menos uno de los miembros de la pareja tiene un estilo de apego seguro. Las personas con un apego seguro tienden a comunicarse mejor y a ser más capaces de comprometerse, cualidades esenciales para una relación sólida.
Tener una pareja que nos brinde seguridad y apoyo no solo mejora la relación, sino que también nos ayuda a enfrentar los desafíos de la vida diaria con mayor confianza.
¿Qué hacer para encontrar la pareja adecuada?
Si bien cada estilo de apego tiene sus propios desafíos, comprender nuestro estilo nos puede guiar hacia relaciones más saludables:
Para los ansiosos, es importante evitar a las personas con estilo evitativo, ya que estos tienden a alejarse emocionalmente, lo que puede aumentar la ansiedad.
Para los evitativos, es útil ser conscientes de los
mecanismos de defensa que empujan a las personas, y trabajar en establecer relaciones más estables.
Para los de apego seguro, la flexibilidad y la comunicación son clave para construir relaciones sanas y duraderas.
Reflexiones finales
Independientemente de nuestro estilo de apego, lo más importante es que nuestra pareja nos trate con consideración y respeto. Si eso no se da, puede ser momento de reconsiderar la relación. Encontrar a alguien que se preocupe por nuestro bienestar y con quien podamos construir una relación segura es fundamental para la felicidad y el éxito en la vida en pareja.
