El bricolaje es como cualquier otra cosa: cuanto más practiques, mejor serás. Ser capaz de hacer trabajos básicos por ti mismo no solo es una manera satisfactoria de pasar el tiempo libre, sino también una habilidad importante que puede ahorrarte dinero.
Contratar trabajos que podrías hacer tú mismo puede ser un gran gasto para tus finanzas, y si le das una oportunidad, podrías descubrir que disfrutas del bricolaje y encuentras un pasatiempo relajante y gratificante.
Si bien no es recomendable que un novato en bricolaje empiece renovando una cocina completa, hay muchos trabajos que cualquiera puede hacer cuando tiene la información adecuada. Desde acicalar a tu mascota y arreglar tu bicicleta hasta realizar pequeñas tareas en el hogar, aquí tienes 8 habilidades básicas (¡pero muy valiosas!) de bricolaje que puedes empezar a aprender hoy mismo.
1. Trabajos pequeños
Todos tenemos que realizar trabajos pequeños de vez en cuando, ya sea poner estantes, instalar barras de cortinas y persianas, colgar cuadros o ensamblar muebles modulares. Lo que todos estos trabajos tienen en común es que usualmente requieren un taladro, y este hecho a menudo desanima a la gente.
Los taladros eléctricos pueden parecer intimidantes, pero son lo suficientemente fáciles de usar para principiantes; solo asegúrate de familiarizarte con la técnica correcta. Una de las mejores maneras de aprender a hacer trabajos pequeños en casa es ver videos online. Existen tutoriales de bricolaje que te muestran cómo hacer casi cualquier cosa, desde colgar un cuadro hasta armar muebles sin problemas.
Si bien algunos se pueden hacer sin un taladro, usando simplemente un martillo y un clavo, para cualquier trabajo serio, te recomendamos invertir en un taladro eléctrico y tomarte el tiempo para aprender a usarlo.
Una vez que te sientas seguro usando esta herramienta, un mundo de bricolaje se abrirá para ti. Podrías sentirte inspirado para realizar tareas más desafiantes, como instalar nuevos muebles de cocina, o incluso podrías descubrir un interés por la carpintería. Por otra parte, si solo utilizas tus nuevas habilidades para trabajos pequeños, ahorrarás una buena cantidad de dinero, ya que contratar a un profesional puede ser muy costoso.
2. Costura y reparación de prendas
Hubo un tiempo en que, si alguien tenía un agujero en su calcetín o un desgarro en su camisa, se buscaba la cesta de costura para arreglarlo por sí mismo. Pero en la era de la moda rápida y la ropa barata, esta habilidad de bricolaje ha caído en desuso. Dominar algunas habilidades básicas de costura es una excelente manera de ahorrarte dinero y asegurar que tu vestuario sea más sostenible. Muchas habilidades de reparación son fáciles de aprender y no requieren una máquina de coser.
Mientras tengas un kit básico de costura con una aguja e hilo, podrás reemplazar botones, hacer dobladillos en pantalones y reparar rasgaduras en la tela. Si descubres que te gusta la costura, podrías considerar comprar una máquina de coser. Estas permiten hacer rápidamente cosas como cortinas, cojines y son una gran manera de ahorrar dinero mientras expresas tu creatividad.
Si no es lo tuyo, entonces podrías considerar aprender a tejer. No solo es terapéutico y excelente para mantener tus manos ocupadas, sino que eventualmente podrías hacer prendas de abrigo para tu vestuario y como regalos para amigos y familiares.
3. Mantenimiento del coche
Si alguna vez has tenido un coche, sabrás lo costoso que puede ser repararlo. Aunque las reparaciones más grandes deben ser realizadas por un mecánico profesional, las tareas más pequeñas se pueden hacer uno mismo. Mantener el vehículo al día es una forma inteligente de ahorrar dinero, ya que muchas reparaciones profesionales son el resultado de haber ignorado arreglos simples, lo que al final hace que el coche sea más inseguro o más costoso de manejar.
Cambiar el aceite y el filtro es un buen punto de partida, siempre que tengas algunos equipos básicos como aceite, un filtro de aceite y un gato. También es útil saber cómo cambiar un neumático, ya que nunca sabes cuándo podrías tener un imprevisto.
4. Reparaciones de bicicletas
Si tienes una bicicleta y disfrutas del ciclismo, lo más probable es que en algún momento te enfrentes a problemas como un neumático pinchado o cambios que no funcionan correctamente. No hay razón para que estos inconvenientes te impidan seguir disfrutando de los beneficios de este deporte. Aprender a mantener y reparar tu bicicleta no solo te ahorrará dinero, sino que también te sacará de situaciones complicadas.
Necesitarás algunas herramientas básicas para comenzar: un kit multiherramienta siempre es una buena idea. Son fáciles de llevar cuando sales a andar en bicicleta, en caso de que necesites una reparación rápida, y son lo suficientemente buenas para usarlas en casa.
5. Fontanería básica
La mayoría de las personas tendrán que lidiar con problemas de fontanería en algún momento de la vida. Desagües obstruidos, grifos con fugas, lavadoras defectuosas y sanitarios que no dejan de correr son problemas comunes del rubro, y afortunadamente, no son tan difíciles de solucionar.
Si te gusta aprender de manera visual, hay cientos de tutoriales gratuitos en línea que te enseñan cómo solucionar problemas de fontanería. Puedes aprender a reparar fugas comunes, familiarizarte con las tuberías debajo del fregadero de la cocina e incluso aprender cómo evitar errores comunes.
6. Cultivar tus propios vegetales
Tal vez la habilidad de bricolaje relacionada con la comida más valiosa sea cultivar tus propias verduras. Hacerlo no solo ahorra dinero, sino que también es mucho mejor para el planeta. Además, la jardinería es una buena forma de hacer ejercicio, y estar al aire libre es excelente para levantar el ánimo.
Incluso si no tienes jardín, aún puedes cultivar tus propios alimentos. Los espacios más pequeños se pueden utilizar para cosechar frutas, verduras y hierbas. Si te gusta aprender a partir de libros, considera adquirir una guía sobre cómo sembrar, acceder a la tierra y elegir las plantas adecuadas para cada espacio.
7. Acicalado de mascotas
Si tienes una mascota, sabrás que nuestros amigos de cuatro patas pueden ser sorprendentemente caros de mantener. Si gastas dinero llevando a tu perro o gato a la peluquería, ¿por qué no consideras hacerlo tú mismo? No solo ahorrarás, sino que también te estarás vinculando con tu compañero. Muchos perros y gatos consideran las visitas al peluquero estresantes.
El costo principal es comprar un cortapelos diseñado especialmente para animales; ya que, los diseñados para humanos no son lo suficientemente potentes y corren el riesgo de cortar la piel del animal.
8. Aprende a cortarte el cabello en casa
No sólo tus amigos peludos pueden beneficiarse del acicalado de bricolaje. Durante la reciente pandemia, muchos nos vimos obligados a probar suerte cortándonos el pelo nosotros mismos. Aunque ya es posible acudir a un profesional, algunos prefieren continuar con los cortes y tratamientos de belleza en casa.
El lado positivo es que hay una gran cantidad de videos en internet con tutoriales de belleza. Ya sea que te interese aprender a cortar el cabello, aplicarte maquillaje, hacer manicuras o pedicuras, o recortar la barba, seguro hay un material adecuado para ti.
Conclusión
Hay algo muy satisfactorio en hacer las cosas tú mismo. El bricolaje no solo es una forma de ahorrar dinero, sino también una excelente manera de vivir de forma más sostenible y reducir el desperdicio. No importa si nunca lo has hecho antes; todo lo que necesitas es la información adecuada y un poco de paciencia. ¡Quién sabe! Descubrir un nuevo pasatiempo puede ser un efecto secundario inesperado, pero bienvenido.