Con el paso de los años, las necesidades financieras de las personas cambian, y para aquellos mayores de 60 años que desean adquirir una vivienda, es fundamental entender las opciones disponibles. Las entidades bancarias tienden a ser más cautelosas al conceder préstamos a personas mayores debido al tiempo limitado para devolver el dinero. Sin embargo, existen productos financieros diseñados para adaptarse a esta situación, como la hipoteca inversa. A continuación, te ofrecemos las claves para obtener una hipoteca si tienes más de 60 años.
Factores a considerar para obtener una hipoteca a partir de los 60 años
Aunque la edad puede ser un factor limitante para algunos, las personas mayores aún pueden solicitar una hipoteca y disfrutar de una segunda residencia o mejorar su calidad de vida adquiriendo una nueva vivienda. A menudo, las pensiones no son suficientes para cubrir todos los gastos, lo que puede hacer necesaria una mayor liquidez.
Algunos de los aspectos más importantes a tener en cuenta al solicitar una hipoteca si tienes más de 60 años son:
Edad límite del solicitante: Las entidades financieras suelen establecer una edad máxima para conceder una hipoteca. En muchos casos, el límite está entre los 70 y 80 años. Sin embargo, algunas entidades pueden flexibilizar esta restricción si los solicitantes son parte de una pareja, tomando en cuenta al miembro más joven.
Plazo de devolución: Para las personas mayores de 60 años, el plazo de devolución de la hipoteca se ajusta para que no se extienda más allá de los 75 u 80 años de edad, dependiendo de la entidad bancaria. Esto significa que si un solicitante tiene 60 años, es probable que el plazo máximo de la hipoteca sea de unos 15 años.
Capacidad de endeudamiento: El nivel de ingresos del solicitante también juega un papel clave. Normalmente, se establece que la hipoteca no debe superar un tercio de los ingresos mensuales. Sin embargo, en el caso de personas mayores, los bancos pueden permitir una mayor proporción de endeudamiento, ya que el plazo para devolver el préstamo es más corto.
Elementos que influyen en la aprobación de una hipoteca para mayores de 60 años
Las personas jubiladas o de edad avanzada pueden encontrar tanto ventajas como inconvenientes al solicitar una hipoteca. Estos son los factores clave que las entidades bancarias consideran:
Ingresos regulares: Las pensiones son ingresos fijos y estables que se reciben cada mes, lo que reduce el riesgo percibido por las entidades bancarias en comparación con ingresos laborales que podrían ser menos seguros.
Ahorros personales: Muchas personas mayores disponen de ahorros que pueden utilizar para cubrir una parte significativa de la hipoteca, lo que facilita la aprobación del préstamo.
Esfuerzo financiero: Los bancos evalúan la proporción de los ingresos del solicitante que se destinará al pago de la hipoteca. Para las personas mayores, las cuotas mensuales tienden a ser más altas debido a los plazos más cortos, lo que los bancos valoran para determinar si el cliente podrá cumplir con los pagos.
Menores intereses: Al ser un préstamo de menor duración, el coste total de los intereses será también más bajo que en el caso de una hipoteca a largo plazo.
Cómo obtener liquidez mediante una hipoteca inversa
La hipoteca inversa es una herramienta financiera diseñada especialmente para personas mayores que desean obtener liquidez sin tener que vender su hogar. Este producto ofrece la posibilidad de recibir un préstamo a cambio de hipotecar la vivienda, que sigue siendo propiedad del solicitante.
Algunas condiciones que deben cumplirse para solicitar una hipoteca inversa son:
Tener al menos 65 años de edad.
Ser propietario de una vivienda.
Los menores de 65 años también pueden acceder a este producto si tienen un grado de discapacidad igual o superior al 33% o si presentan dependencia severa.
Es fundamental contar con herederos.
El préstamo no debe superar el valor de tasación de la vivienda.